“¿Cuál es nuestra misión?”
-¿Cuál no es nuestra misión?-
Creemos que deberíamos de comenzar, para no confundir a nuestros lectores, por la segunda de éstas preguntas. Así podrán deducir lo que somos y lo que no somos, lo que pretendemos y aquello que no.
No estamos aquí para crear una secta ni una nueva organización rosicruciana. Ya trabajamos para la genuina Rosacruz Alemana, en su versión ibero parlante, la F.R.A.(Fraternitas Rosicruciana Antiqua). No estamos aquí para imponer nuevos dogmas o reafirmar los ya existentes y creados por diversas instituciones; sino para decirte que eres libre de pensar como desees y actuar como buenamente quieras, siempre que no afectes, negativamente, a terceras personas o atentes contra la Naturaleza.
No vamos a obligarte a nada, ni a tener o no tener hijos, ni a ser o dejar de ser vegetariano o cualquier otra cosa. No vamos a imponerte la adoración a un determinado Dios; ni a que dejes de creer en Él. Eso es sólo cosa tuya y sólo afecta a tu propia conciencia. No te vamos a pedir dinero para buenas obras ni para facilitar nuestro trabajo; de hecho, nunca lo hemos hecho hasta ahora, ni creemos que lo vayamos a realizar en el futuro.
En definitiva, no hemos venido para ser un pepito grillo de nadie; es decir, para sustituir a vuestra propia Conciencia e interferir con vuestro sagrado libre albedrío, sino para, con nuestras reflexiones, haceros reflexionar y que escuchéis a vuestra propia Conciencia y hagáis caso de vuestra inefable intuición; en tanto que destellos de vuestro verdadero Ser.
Nuestra misión es confirmaros que existe un verdadero Cristianismo y muchos otros cristianismos impostores. Que el Cristianismo verdadero nada tiene que ver con cualesquiera religión, aunque nacieron bajo la influencia de un gnosticismo primigenio. Sí, el mismo gnosticismo que dió lugar a todas las religiones. También al Mitraísmo de origen hindú y al Zoroastrismo Persa, a la Filosofía Griega de Sócrates y a la Escuela de Platón. La misma Gnosis que inspiró al Maniqueísmo, al Neoplatonismo, al Hermetismo Alejandrino y al Platonismo-Pitagórico heréticos; en suma, al Cristianismo Original, previo a la transformación en la Religión Oficial de Roma y sus posteriores subdivisiones: (El Catolicismo de Roma, la Ortodoxia Bizantina, el posterior intento de Reforma Protestante de Lutero, Calvino y tantos otros…) Sí, se trata de la misma Gnosis que inspiró a los filósofos griegos y a los magos caldeos o a los sacerdotes egipcios; pero que esa Gnosis, que predica el Cristianismo y, por lo tanto, también la genuina Rosacruz Gnóstica, no es una Gnosis sujeta a doctrinas y dogmas; sino un Cristianismo Liberador, en donde el contexto histórico es puramente circunstancial, no imprescindible, y cuya importancia pasa a un segundo plano, siendo lo verdaderamente importante, la Verdad que contiene su profundo Simbolismo.
Un Simbolismo que comienza con el mismo Nombre del Redentor; Jesucristo: Jesús-Cristo: Salvador-Mesias o el “Salvador enviado”; todo ello es una misma cosa.
Estamos aquí para que entendáis que el Cristianismo pertenece a una Nueva Dispensación del Evangelio de la Redención, que hace borrón y cuenta nueva con la Antigua Dispensación del Temor y la ciega Obediencia a un Ser, supuestamente, Superior, Todopoderoso, Perfecto, Celoso y único y que requería de la adoración de sus seguidores, su Pueblo Elegido, todo ello mostrado en la Torá Judía o Antiguo Testamento.
En la Nueva Dispensación, inaugurada por el Mesías no hay personas elegidas ni un Pueblo Elegido; todos formamos, en Cristo Jesús, ese Pueblo Elegido independientemente de sus ideas religiosas, sangre u origen. El Mesías Salvador vino para hacer tábula rasa y hacernos saber que todos somos hermanos en Cristo Jesús y que podemos ser, por lo tanto, hijos de Dios si así lo deseamos y reconocemos.
Estamos aquí para recordaros que en todos nosotros, sin excepción vive Cristo Jesús; aunque, en algunos, más despierto que en otros. Qué ése Cristo Jesús es la Chispa Divina que vive en todos y cada uno de nosotros; pero una Chispa que, en tanto que personas, debemos ayudar a despertar, hacernos conscientes de Él y aceptarlo como nuestro personal Redentor; es decir, salvador de nuestra Conciencia y Memoria, en tanto que Personalidad.
Estamos aquí para ayudaros a recordar que el Mundo no es un Parque de Atracciones donde venir a disfrutar y Ser felices, sino un Templo Cósmico de dura Iniciación y que la Vida es el Camino Iniciático conducente a la Redención; es decir, a la Salvación del Alma-Personalidad. Qué ése Camino es lo que la Rosacruz conoce como “Imitación de Cristo” o “Proceso de Cristificación”.
Qué la Vida no es otra cosa que eso, un proceso de redención personal conducente a la transmutación o transfiguración del Alma. El Discípulo Gnóstico Pablo; denominó a ése resultado final como el Nuevo Nacimiento, en donde el Viejo Hombre (Alma-Personalidad) debe transformarse en el Hombre Nuevo (Hijo de Dios)
Estamos aquí para recordaros que todos somos Hermanos, en Cristo Jesús y, por lo tanto, al igual que Él, hijos de Dios; pero sólo será así si nosotros, conscientemente, lo aceptamos así libremente, porque nuestra Libertad es inviolable y sagrada.
Aceptar la existencia de Cristo en nuestro Corazón es fundamental para poder recibir la Gracia de la Fe. La Pistis que junto a la Sophía, la Sabiduría dará lugar a la Gnosis o Conocimiento de lo Divino, en donde, al conocernos a nosotros mismos, da lugar al Conocimiento de nuestra Unidad con Dios y, consecuentemente, de Dios mismo. El mismo Dios que, ahora mismo, nos es incognoscible como incognoscible es nuestro propio Ser.
Estamos aquí para ayudaros, si así lo deseáis, a comprender que la Rosacruz es Apostólica y Evangélica, en el sentido de mostrar el Camino a seguir para redimir a nuestra Alma Personalidad y completar el Proceso Crístico de la Transfiguración; en tanto que la Salvación es por la Gracia Divina de la Fe que nos proporciona la Sabiduría Crística de la Gnosis; entonces, si la Fe es Gnosis, la Salvación no es resultado de un mero creer en lo que un Ministro, Pastor o Sacerdote nos diga, sino en la certeza procedente de Cristo, nuestro verdadero Ser.
Que esa Rosacruz reformadora del Mundo es Cristianismo puro en su máxima expresión. Una Rosacruz Invisible que no requiere ni de templos ni de sacerdotes o ministros externos; en tanto que cada uno somos templos del Espíritu Santo y el Supremo Ministro, Señor y Sacerdote (Cristo), vive en su Interior; siendo éste, Cristo, el único Mediador entre Dios, el Pleroma Incognoscible, y nosotros, en tanto que Alma-Personalidad.
Que el Proceso Iniciático, aunque sea aparentemente exterior en el Teatro de la Vida, en el fondo se trata de un Viaje Interior o de introspección hacia lo más profundo de nosotros mismos con el fin de descubrirnos a nosotros mismos; de descubrir a Cristo, nuestro verdadero Ser, dentro de nosotros recubierto de nuestras muchas capas de Personalidad.
La Idea es descubrirnos a nosotros mismos, en tanto que Maestro Interior, ponernos a su disposición y dejar que Él, como Dueño y Señor de lo que somos, dirija el Camino Iniciático de la Vida que se desarrolla en éste Mundo de Ilusión, con el fin de finalizar el Proceso y regresar renovados; es decir, redimidos, a nuestro verdadero Hogar Celeste, como ése Hombre Nuevo e Inmortal surgido de aquel Hombre viejo y mortal.
Para eso andamos por acá y no para otra cosa. Para nosotros recordar y, al mismo tiempo, ayudaros a que recordéis, por vosotros mismos, también.
Que las Rosas florezcan sobre vuestra Cruz
Frater Aralba R+C
No hay comentarios:
Publicar un comentario