“No existe la gente desalmada”
-Entonces ¿Ante qué nos encontramos?-
¿Cómo se atreve usted a llevarle la contraria a los grandes del Ocultismo?
Todo, absolutamente todo tiene Alma debido a la impregnación espiritual del Creador. Una simple fotografía está impregnada de Alma, una parte del fotógrafo y otra de la Persona fotografiada. Una Inteligencia Artificial porta pequeñas porciones del Alma de sus creadores. Un mueble mantiene parte del Alma de los árboles de donde ha surgido la madera; pero también del Ebanista que lo ha construido, porque el Alma fluyó por sus manos de artesano.
En la Película Matrix aparece un programa, supuestamente sin Alma, la mujer de rojo; pero incluso los algoritmos informáticos portan una porción del Alma de sus programadores, del mismo modo que nosotros, en tanto que humanos, portamos en nosotros a Cristo, al Espíritu Santo y a Dios Padre, en tanto que Cristo y el Espíritu Santo, siendo características diferenciadas de Dios, son una única y misma Cosa, pues las emanaciones no son creaciones a partir de cero; es decir, una emanación no posee una fecha de nacimiento, pues en su Ser mantiene su memoria ancestral del Ser Original, el Pleroma, del que procede, que jamás tuvo un principio y jamás tendrá un final.
Sabemos que grandes esoteristas del pasado han contado que existen seres desalmados; es decir, seres que viven entre nosotros y no poseen Alma. Bien, eso es una invención como el Purgatorio, el Infierno o la propia Reencarnación del Alma. Una invención realizada para calmar nuestra natural inquietud por entender la maldad del Ser Humano. Una maldad que, como hemos repetido, no es más que Bien en Formación, el resultado de no estar terminado; es decir, acabado. Son los defectos de construcción que deben de ser afinados antes de ver el producto final terminado.
Todo, hasta las piedras o las moléculas de aire o de agua poseen su Ánima, su Alma porque es por dicha Alma material que todo existe. En los minerales esa Alma se encuentra de forma latente y pasiva, mientras que en las plantas y en los animales se encuentra activa en sus diferentes niveles, dependiendo de su metabolismo biológico.
Pero, además, esa Alma completamente material y, por lo tanto mortal, posee su correspondencia con una Alma Inmortal que se encuentra en el Pleroma y que se encuentra interconectada a ella mediante un cordón energético plateado que atraviesa la membrana etérica de la Esfera Reflectora. Recuerden que ésta membrana interdimensional es la que separa al Mundo Físico del Pleroma o Mundo de Dios del de las Ideas. Digamos, para entendernos, que el Alma del Programador sería esa Alma para el alma material de la Inteligencia artificial o la del artesano para el mueble construido o la del pintor para su pintura; de algún modo, mientras la Obra persiste mantiene una ligazón con su Creador, incluso después de que éste hubiese fallecido. Así, en la Obra de grandes pintores como Velázquez o Goya, por poner algún ejemplo, persisten parte de sus almas; pero también la de aquellos que fueron plasmados en sus lienzos.
Es muy importante ser conscientes de que todo tiene su alma. Un Alma que si tiramos del hilo siempre llega al mismo destino, Dios; en tanto que todo procede de Él. Todo, de un modo u otro, directamente o mediante intermediación, procede de Dios.
Siento desconcertar a los que creen que existen seres sin Alma y que después de la muerte desaparecerán para siempre. Miren, por favor, no se tomen la Vida tan a pecho ni guarden rencor en sus almas. La Vida es, no es cómo, es un mero juego donde el sufrimiento y la muerte pertenecen a su trama; pero, en el fondo, no poseen una existencia permanente. Si usted pierde al parchís con su amigo, no le va a guardar rencor eterno. Ya sabemos que a nadie nos gusta perder y nos llevamos un disgusto cuando aparece el temido “Game Over” en la pantalla; pero ese final del Juego es sólo temporal y, recuerden, todo lo que sucede en el Universo no se perderá para siempre pues queda almacenado en los registros de la Memoria de la Naturaleza, en la Esfera Reflectora. Una memoria que al final del Tiempo será rescatada por los propios registros del Pleroma, donde se almacenan todas las Ideas.
También el asesino, como todos los depredadores cumple con su función programada. Las cosas pasan porque tienen que pasar debido a que están programadas; pero cuando termine la función Teatral de la Vida, tanto el Protagonista como el Villano se darán un abrazo e irán juntos a cenar o a tomarse unas cervezas.
Nuestro mejor consejo es que nada de lo que les suceda se lo tomen como algo personal, dado que se trata de algo que está escrito en el libreto de sus vidas.
Lo siento, pero ni Caín ni Judas Iscariote dejarán de existir o serán lanzados al Infierno para que purguen sus pecados por toda la Eternidad. Ellos cumplieron con su función, uno de asesino y el otro de traídor; pero podemos asegurar que Caín y Abel son los mejores amigos posibles y que el Amor de Jesús por quién estaba condenado a traicionarlo es inconmensurable.
Así es que no olvides nunca que todo es Alma, pues vivimos sumergidos en el Éter que es el Alma del Mundo y lo que nos une al Pleroma; en tanto que el Éter es la Substancia de la que está formado Dios; es decir, Todo, y aquello que posee Éter posee Alma, pues ésta lo impregna todo, dado que las cosas están construidas en y por el Éter. Y el Éter es el Alma de Dios, su Espíritu Santo, mientras que nosotros, sus criaturas, somos sus hijos y por lo tanto, todos somos hermanos en Cristo Jesús, el Unigénito de Dios y responsable de la Creación del Universo; en tanto que Jesus-Cristo es el Verbo y el Verbo es el Logos, la Palabra, y la Palabra es el Demiurgo o Voluntad de Sophía, el Dios Padre-Madre, en cuyo Seno, la Naturaleza, todos desarrollamos la función de nuestros personajes.
Conociendo que todo posee su Alma, podremos respetar incluso las cosas que, a nuestro entender, nos parezcan inanimadas, como un jarrón chino, un juguete o el dibujo que nos regalará nuestro Hijo. Todo, absolutamente todo, está impregnado del Alma d
e Dios.
Frater Aralba R+C
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